Palabras del Torá / a “vort” of Torah from R’ Sunny Schnitzer

Each month Bayit offers regular video “vorts” (words of Torah / teachings from Jewish tradition) offered in or translated into Spanish, designed for Cuban Jewish communities and available to Spanish-speaking Jews everywhere. This month’s offering features a teaching from Rabbi Sunny Schnitzer. The text follows the video link, in Spanish and then in English. Deepest thanks to Rabbi Juan Mejia for translation help.

Find this month’s video here. 

A menudo  durante nuestra amistad, diecisiete años después de conocernos en mi primera visita a Cuba, hemos comentado cómo nuestro judaísmo nos une. No importa cuán lejos vivamos los unos de los otros, no importa las diferencias en nuestras culturas nacionales, hay mucho más cosas que nos unen que aquellas que nos separan. Compartimos una historia, una cultura, una forma de ver el mundo a través de los lentes de la Torá.

Ahora mismo, en medio de esta pandemia mundial, compartimos las máscaras, los dos metros de distancia al hacer cola, la escasez de papel higiénico (una novedad en Estados Unidos).

No comparo nuestras situaciones. En verdad, no hay comparación. Pero se necesitará la misma acción por parte de todos para sacarnos de esta oscuridad. Debemos trabajar más duro para compartir nuestra luz.

Es un principio espiritual que cuando compartimos nuestra luz espiritual con otros, nuestra luz no disminuye sino que aumenta. Cuanta más luz compartimos con los demás, más luz fluye a través de nosotros.

Janucá es algo realmente simple. A diferencia de Pesaj o Sucot, que requieren mucha preparación: limpiar la casa, hornear o ubicar la matzá, construir la sucá, Janucá requiere poca preparación. A diferencia de las festividades que también tienen restricciones, Janucá no tiene restricciones.

Uno simplemente enciende la Janukia durante ocho noches y uno se apega a la luz y bendición divinas. Es simple, pero profundo. En una época del año cuando los días son más cortos y las noches más largas; Janucá irradia esperanza, fe y amor incondicional, recordándonos que debemos soñar de nuevo, que nuestros sueños son hermosos e importantes. La capacidad de aferrarse a los sueños y la esperanza, incluso en medio de una crisis, es lo que ha sostenido a nuestra gente en sus días más oscuros.

Los macabeos lucharon por la supervivencia del espíritu en medio de una presión inimaginable para cambiar su forma de vida.

La suya fue una afirmación clara que suena a lo largo de la historia y llega a nuestra época.

No importa cuán atractiva sea la cultura del mundo en general, no importa cuán seductora sea, de alguna manera los judíos deben seguir siendo judíos. El milagro del aceite que usaron los Macabeos para encender la Menorah en el Templo es la declaración definitiva

La idea de un mundo sin judíos e ideales judíos fue rechazada. Y el rechazo de la oscuridad fue recompensado con una revelación de luz que ha mantenido vivo a nuestro pueblo durante más de dos mil años.

No importa lo que esté sucediendo en el mundo externo, Janucá nos enseña que podemos ser libres y que no debemos estar limitados por nuestros miedos. Podemos vivir nuestras vidas con mayor integridad, gratitud, amor y belleza, incluso en medio de nuestros desafíos.

Es un principio espiritual que cuando compartimos nuestra luz espiritual con otros, nuestra luz no disminuye sino que aumenta. Cuanta más luz compartimos con los demás, más luz fluye a través de nosotros “.

Que te inspire la luz en la oscuridad.

¡Feliz Janucá!


During our friendship, now going on 17 years since we met on my first visit to Cuba, we have remarked often on how our Judaism brings us together. No matter how far away we live from each other, no matter the differences in our national cultures, there is much more that keeps us together than apart. We share a history, a culture, a way of looking at the world through the lens of Torah.

Right now, in the midst of this worldwide pandemic we share the masks, the standing 6 meters apart in lines, a shortage of toilet paper (a first in the United States).

I do not compare our situations. In truth, there is no comparison. But it will take the same action by everyone to bring us through this darkness. We must work harder to share our light.

It is a spiritual principle that when we share our spiritual light with others, our light is not diminished but increased. The more light we share with others, the more light flows through us.

Hanukah is a simple thing really. Unlike Pesach or Sukkot which require much preparation – clean the house, bake or locate the matzah, build the sukkah, Chanukah requires little preparation. Unlike those holidays which also have restrictions, Chanukah as no restrictions.

One simply lights the Chanukiah for eight nights and one is attached to Divine light and blessing. It is simple, but profound. At a time of the year when the days are shortest and nights are the longest; Chanukah radiates hope, faith, and unconditional love, reminding us to dream again, that our dreams are beautiful and important. The ability to hold onto dreams and hope, even in the midst of crisis, is what has sustained our people in their darkest days.

The Maccabees fought for the survival of the spirit in the midst of unimaginable pressure to change their way of life.

Theirs was a clear statement that sounds throughout history and reaches us in our era.

No matter how attractive the culture of the larger world, no matter how seductive, somehow Jews must continue to be Jews. The miracle of the oil that the Maccabees used to light the Menorah in the Temple is the ultimate statement

The idea of a world without Jews and Jewish ideals was rejected. And the rejection of the darkness was rewarded with a revelation of light that has kept our people alive for over two thousand years.

No matter what is happening in the external world, Chanukah teaches us that we can be free and we need not be limited by our fears. We can live our lives with greater integrity, gratitude, love and beauty, even in the midst of our challenges.

It is a spiritual principle that when we share our spiritual light with others, our light is not diminished but increased. The more light we share with others, the more light flows through us”.

May you be inspired by the light in the darkness.

Happy Chanukah!

 

 

Rabbi Sunny Schnitzer

By Rabbi Sunny Schnitzer. Translation help from Rabbi Juan Mejia.